¿Qué no puedes dejar de probar si solicitas un catering de comida griega?
Artículo revisado por el Comité
La cocina griega conjuga lo mejor de la gastronomía mediterránea, donde aroma, sabor y color se dan la mano para deleite de los amantes de la gastronomía helena.
Los catering de comida internacional suelen ser una interesante opción cuando se quiere disfrutar de un evento temático o cuando se siente verdadera pasión por un tipo de comida determinado.
De hecho, hay personas que adoran la comida italiana y convierten el catering de su evento en una celebración temática para degustar la gastronomía del país ítalo. Y lo mismo sucede en el caso de la comida mexicana o griega, por ejemplo.
Las artes culinarias helenas comparten ingredientes con países como Italia o España, por cuanto como ellos, sus elaboraciones son típicamente mediterráneas. Alimentos como las aceitunas, el aceite de oliva, los tomates, las berenjenas, las patatas y las hierbas aromáticas son parte indiscutible de las comidas que se preparan en Grecia. Pero hay una serie de platos que son imprescindibles en cualquier catering de comida griega que se precie, platos tan típicos que no puedes dejar de probar si solicitas un servicio de catering especializado en gastronomía helena.
- Ensalada de verduras con queso feta. El queso feta es a la gastronomía griega lo que el manchego a la española o el parmesano a la italiana. Probar una ensalada de verduras con queso feta es sumergirte en la ensalada helena por antonomasia, uno de los platos más típicos de su cultura.
- Moussaka. Si el queso feta es conocido, la moussaka es, posiblemente, el plato más famoso. Esta lasaña de berenjenas, patatas y carne de cordero picada con tomate y bechamel es una comida que no podemos dejar de probar si optamos por un catering especializado en gastronomía típica helena. Aunque este pastel se prepara en toda la zona de los Balcanes, la receta griega es la más conocida.
- Tiropita y spanakopita. El primero se trata de un pastel elaborado con masa filo y relleno de quesos típicos del país, entre ellos, como no, el queso feta. Si el pastel está relleno de espinacas, se denomina spanakopita, otro plato que tenemos que degustar.
- Dolmadakia. Otro clásico de la cocina griega. Son hojas de parra que contienen en su interior arroz, verduras y carne de cordero. Suele acompañarse con piñones o con salsa de huevo.
- Fasolada. Un plato caliente muy típico que podemos probar los días más fríos. Es un potaje griego famoso que está compuesto por alubias blancas, zanahorias, cebollas, tomate, apio y aceite de oliva. Todo un lujo para los que sienten debilidad por los platos de cuchara.
- Souvlaki. Parecido a nuestros pinchitos, es un plato que se prepara muy rápidamente y que es una delicia para los amantes de la carne y de las especias. Se puede acompañar de pan de pita, salsa tzatziki o tomates maduros.
- Yemistá. Los apasionados de estos vegetales encontrarán este plato un manjar exquisito. El yemistá no es más que tomates maduros rellenos de arroz y carne picada. De este plato pueden prepararse muchas variedades en función de las verduras que elijamos. Así, los hay que sustituyen los tomates por calabacines o los que eligen pimientos para contener la carne sazonada y el arroz.