¿Cómo organizar un catering?
Artículo revisado por el Comité
Saber qué queremos organizar y cuándo lo vamos a organizar son las dos preguntas principales que determinarán la organización de nuestro catering.
A la hora de organizar el catering para un evento debemos tener en cuenta una serie de cuestiones muy importantes para que el resultado sea el esperado.
Somos conscientes de que hay aspectos que, si no estamos habituados a gestionar eventos, podemos olvidar. Por eso, en este artículo te traemos una serie de cuestiones a las que tendrás que prestar atención, porque que te ayudarán a organizar tu catering de manera eficiente.
¿Qué tipo de catering queremos?
Antes de comenzar a organizar el catering tenemos que pensar qué catering queremos organizar. Es decir, tenemos que elegir si deseamos organizar un cóctel, si preferimos un bufet, si vamos a encargarnos de un coffee break o si sencillamente deseamos que se trate de una comida o cena especial (ya sea de gala, de negocios o con motivo de otra celebración privada). El tipo de catering dependerá, como es lógico, del tipo de evento. Pero dentro de cada evento podemos optar por un catering u otro.
Una vez hecha esta elección, tendremos también que pensar cómo queremos disponer a los invitados, si vamos a poner mesas para que permanezcan sentados durante la celebración, al modo traidicional; o si, en cambio, queremos un catering en el que los invitados estén de pie, porque el evento sea más informal.
Saber qué catering vamos a elegir es básico para gestionar todo el trabajo posterior, ya que de esta decisión dependerá que contratemos mobiliario, que necesitemos camareros, que busquemos un lugar específico, que completemos el servicio con otros profesionales, como un cortador de jamón, que necesitemos animación para el momento de después, etc.
¿Cuándo comenzamos a organizarlo?
El inicio de la organización dependerá del tipo de evento que se trate. Si vamos a gestionar una cena de gala de una empresa o una boda, por ejemplo, tendremos que empezar con tiempo necesario para elaborar una lista de invitados, enviar las invitaciones, buscar un salón lo suficientemente grande para tantas personas, confirmar la asistencia, etc.
En cambio, si se trata de un catering para un aniversario familiar, habrá aspectos que no requerirán tanta anticipación. Posiblemente no sea necesario elaborar una larga lista de invitados, ni enviar invitaciones, ni buscar un lugar que acoja a una multitud de invitados.
Camareros ¿sí o no?
Como hemos comentado más arriba, esto dependerá mucho del tipo de evento, pero, en líneas generales, los camareros suelen ser una opción muy adecuada para casi cualquier celebración que se precie. Aunque vayamos a organizar un cóctel y los invitados estén de pie, próximos a las mesas donde estará la comida, compartiendo ese momento de manera distendida. La presencia de camareros para portar la bebida o para atender cualquier problema que surja durante el evento es un elemento a tener en cuenta. A los invitados y protagonistas de la celebración les gustará sentir que están atendidos en todo momento y los organizadores del evento podrán delegar este aspecto en profesionales formados en protocolo y con amplia experiencia que le otorgarán un aspecto exquisito al catering.