Recepción informal: da las gracias a tus invitados con pizza

¿A quién no le gusta comerse una buena pizza? Muchas personas escogen un día especial para salir a degustar una deliciosa pizza preparada por especialistas. Otras prefieren saborearla en la comodidad de su hogar y darle un toque especial a una noche de ocio. También es una buena opción para recibir amigos y disfrutar de una noche relajada.

Con una gran variedad de sabores para agradar a todos los paladares, la pizza es una pasión nacional. Práctica y muy sabrosa, puede servirse durante una merienda o como plato principal en una comida más formal. Pero ¿cómo preparar las pizzas perfectas para recibir a amigos y familiares en casa? He aquí algunos consejos para organizarlo todo.

¿Pizza o minipizza?

Amén de los diferentes tipos de ingredientes, las pizzas también pueden adaptarse a diversos tamaños en función de la cantidad de personas. Podemos optar por hacer pizzas grandes o elegir preparar varias de menor tamaño, como las pizzas infantiles. La diferencia está en la variedad de ingredientes con los que se puede preparar. Ello no impide que elijamos una pizza grande y escojamos varios tipos de ingredientes.

Además de esos dos tipos de pizza, también hemos de tener en cuenta las minipizzas. Se trata de porciones individuales de pizza de pequeño tamaño con la forma de una pizza completa. De este modo, cada invitado podrá escoger los ingredientes que más le gusten.

Recuerda: tendremos que comprar ingredientes especiales si vamos a recibir a personas con alguna intolerancia alimentaria.

Calcular bien las cantidades

El secreto para disfrutar de una buena noche gastronómica en casa es calcular de forma adecuada las cantidades que consumirá cada persona. Y esto vale también para las pizzas.

El cálculo depende mucho de cuánto coma cada persona. Teniendo en cuenta que algunos comen más que otros, el cálculo debe hacerse con unos valores medios.

¿Cómo saber la cantidad para no pasarse o no quedarse corto? Todo se complica cuando el grupo de invitados es aún mayor, pero no es imposible establecer una cantidad aproximada.

Para ello, podemos calcular que cada persona se comerá unas tres porciones de pizza. Podemos optar por minipizzas y considerar que cada una de ellas equivale a una porción. Si elegimos un tamaño familiar. Basta con hacer un cálculo basándonos en que cada pizza puede cortarse en ocho porciones.

Elaboración de la masa y de la salsa

Antes que nada, habrá que decidir si vamos a elaborar nosotros la masa en casa y también la salsa o vamos a comprar esos ingredientes ya preparados. Si elegimos hacer la masa y el tomate nosotros mismos, es mejor buscar una receta que ya hayamos hecho, o que sepamos que podemos hacer, para evitar sorpresas de última hora el día de la reunión.

La salsa es lo más sencillo de preparar. Para una salsa simple, solo necesitaremos tomate, cebolla y un poco de agua. Podemos comprar también salsas especiales y de diferentes tipos para que los invitados elijan la que más les gusta. El secreto es hacerlo todo más fácil.

Ingredientes de la receta

Las pizzas pueden prepararse con distintos ingredientes, con sabores dulces y salados. No debemos olvidarnos de aquellos que son vegetarianos. Además, debemos procurar utilizar ingredientes frescos.

Quizá la parte más complicada sea la de elegir ingredientes que gusten a todos. Podemos escoger preparar pizzas con ingredientes tradicionales, porque así seguro que acertamos; pizzas margarita, cuatro quesos, calabresa, napolitana… También podemos seleccionar algunos ingredientes especiales y dejar que cada uno escoja aquellos que quiere para su minipizza o porción. Te recomendamos que no ofrezcas una variedad excesiva de ingredientes, porque puede complicar la elección.

Preparación anticipada

Es mejor dejarlo todo preparado con antelación, incluso los ingredientes para la pizza. Todo debe estar picado o cortado. Después los colocaremos a la vista. Así, cada invitado podrá escoger los que desee.

Si uno de ellos va a preparar su propia minipizza, pondremos cada ingrediente de forma separada, en pequeños recipientes o boles, y los dispondremos en la encimera de la cocina, si vamos a elaborar la pizza allí, o en la mesa donde vayamos a comer. De este modo, les resultará más fácil cogerlos.

Si hemos decidido hacer la masa en casa, es recomendable que preparemos algunas bases de pizzas. Ello agilizará el proceso y reducirá los tiempos para montar los ingredientes.

No podemos olvidarnos de tener a mano las manoplas para meter las pizzas en el horno.

Mientras que los invitados esperan

Es extremadamente desagradable que una persona tenga que esperar mucho tiempo para comer cuando va a casa de alguien. Por ello, mientras esperamos a todos los invitados y durante el tiempo que tarde en hacerse las pizzas en el horno, tendremos que servir algunos aperitivos.

Estos tienen que ser ligeros para que no llenen demasiado y quiten el hambre. Podemos poner aceitunas, queso, cacahuetes, verduras cortadas en tiras…

También podemos servir algo de beber, como licores o cócteles. Para lo que no toman alcohol, una buena opción son las aguas con sabor y los refrescos.

Montar la pizza

Si nuestra cocina está abierta al comedor, podemos usar la encimera para crear dos ambientes: uno para el acopio de ingredientes y otro para la preparación de las pizzas. Si no disponemos de ello, podemos usar la mesa del comedor.

Hay que organizarlo todo para que cada uno pueda acceder a todos los ingredientes. Dejaremos en un lado la masa y la salsa; luego pondremos los demás ingredientes, como si estuviéramos en una cadena de montaje.

Para servir

Pondremos en la mesa un mantel bonito. A pesar de que la pizza es un plato para un evento informal, muchas personas necesitan platos para comer. Por ello, es importante que coloquemos varios de ellos en la mesa para que aquellos que los quieran puedan utilizarlos.

A la hora de servir, no nos podemos olvidar de los condimentos.

Por último, lo ideal para acompañar la pizza es un buen vino tinto. También podemos elegir un vino blanco o rosado. Además, es recomendable que tengamos cerveza para aquellos que no les gusta el vino.