Los celíacos ya pueden comer pan de trigo
Artículo revisado por el Comité
Un estudio ha conseguido modificar genéticamente el gluten para que los celíacos puedan comer alimentos elaborados con harina de trigo.
Un equipo de investigación formado por miembros del Instituto de Agricultura Sostenible del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de las universidades de Sevilla y Minnesota ha conseguido una variedad de trigo que haría posible su consumo por parte de las personas intolerantes al gluten.
Casi el 1 % de la población de nuestro país es celíaca, una enfermedad que afecta más a mujeres que a hombres, según los datos apuntados por la Federación de Asociaciones de Celiacos de España. Solo el 25 % está diagnosticado. Se estima que el 75 % no sabe que padece esta enfermedad sistémica inmunomediada causada por el gluten y las prolaminas, una afección que daña la mucosa del intestino delgado e impide la correcta absorción de las vitaminas y minerales presentes en los alimentos que digerimos.
De este modo, las personas que presentan intolerancia al gluten no pueden comer ningún alimento que contenga esta proteína amorfa. A pesar de que el gluten se encuentra en cereales como la cebada o el centeno, es el trigo el que mayor porcentaje proteínico de gluten tiene. De ahí que sea este el primer alimento que retiran de su dieta los celíacos.
La investigación, dirigida por Francisco Barrio, del Instituto de Agricultura Sostenible del CSIC, en la que también han participado la Universidad de Sevilla y la de Minnesota, se ha centrado en alterar genéticamente el trigo para eliminar hasta el 90 % de las gliadinas que componen el gluten y desactivar 35 de sus genes para que la proteína no vuelva a producir gliadina. El proceso se llevó a cabo mediante una edición genética mediante la técnica CRISPR, una técnica que permite modificar la composición genética de cualquier ADN, en este caso, de la proteína del trigo.
Los resultados de este estudio, que ha sido probado en México y en España, son muy satisfactorios. Los sujetos que están consumiendo pan elaborado con el trigo modificado genéticamente no han presentado síntomas de intolerancia, por lo que las perspectivas son muy esperanzadoras. Con este trigo alterado genéticamente se podía elaborar pan que podrían consumir los intolerantes al gluten. Y es aquí donde cobran protagonismo las empresas dedicadas a la alimentación. La compañía inglesa Plant Bioscience Ltd. (PBL), que normalmente trabaja en los proyectos del Instituto de Agricultura Sostenible del CSIC, busca apoyo y financiación en países como Estados Unidos. El objetivo es claro: producir pan de trigo con la harina procedente del trigo cuya proteína ha sido alterada genéticamente por los investigadores españoles.
No se trata solo de que los celíacos puedan consumir pan de trigo con tranquilidad, disfrutando de su sabor y de sus propiedades, sino de que económicamente se pueda preparar pan cuyo precio sería bastante más bajo que el que presentan normalmente los productos sin gluten que tienen que consumir las personas con intolerancia. Elaborando no solo pan sino también otros productos con harinas procedente de trigo modificado genéticamente se conseguiría frenar el excesivo gasto que supone para las familias la enfermedad sistémica inmunomediada a causa del gluten y las prolaminas.
Que buena noticia!!! Ojalá Se haga realidad pronto!!