No te podrás resistir a estas brochetas
Artículo revisado por el Comité
Se dice que nació en Francia aunque, tanto si es así como si no, la brocheta o pincho está actualmente integrada como una forma más para cocinar y presentar todo tipo de alimentos.
Así, por ejemplo, en Francia es común ensartar todo tipo de carnes y vegetales en estos pinchos o brochetas -metálicos o de madera- para cocinarlos, pero también se utilizan pinchar los ingredientes dulces y salados que se degustan en una fondue.
Por otra parte, son muy conocidos el shish kebab turco, el souvlaki griego, el satay asiático, el yakitori japonés y, por supuesto, el popular pincho moruno español. El ingrediente común de todos ellos suelen ser los trozos de carne de cordero, pollo o cerdo que pueden presentarse solos o con algún tipo de vegetal entremedias –normalmente pimiento, cebolla o tomate-.
Aunque también es frecuente encontrarlos con pescados o mariscos –especialmente gambas o langostinos-, y entre todos ellos destaca el tradicional espeto de sardinas típico del sur español.
Foto de Afán Catering y Eventos.
Igualmente, y gracias a la constante búsqueda de la innovación gastronómica, existen brochetas que mezclan casi todo tipo de ingredientes, tanto dulces como salados, lo que favorece que puedan servirse como plato único, de entrante o, incluso, como postre.
Los pinchos pueden cocinarse de formas muy diferentes en función de los ingredientes que las compongan, el tiempo disponible y el momento en el que se quieran servir. Entre las más comunes están
- Crudos: Son los que suelen servirse como aperitivo o postre, ya que incluyen ingredientes frescos y naturales como quesos, salazones y encurtidos –anchoas, arenques, pepinillos, etc.- , ahumados, tomates cherry o cualquier tipo de frutas.
- A la brasa, a la plancha o al horno: La carne es el ingrediente estrella en este tipo de preparaciones, y puede ir acompañada con vegetales que no se deshagan –calabacín, cebolla, berenjena, pimiento, etc.-. Si se cocina a la brasa o a la plancha cabe la posibilidad de aderezar la brocheta con especias más o menos intensas o vinagretas algo más fuertes. Mientras que si se opta por el horno, conviene que las maceraciones sean más suaves –también admite la preparación con frutas como la piña o el mango-.
- Fritos, rebozados o empanados: Son las más calóricas, por lo que se recomienda servirlas como plato único. Admiten casi cualquier ingrediente, aunque lo ideal es emplear alimentos con poco agua para que no empapen los rebozados y se mantengan crujientes y sabrosas.
- Al vapor o hervidos: Suelen prepararse así las brochetas compuestas íntegramente por verduras o ingredientes típicamente vegetarianos como las algas, el tofu o el seitán. En este caso no se utiliza ningún tipo de maceración porque se perdería al introducir el pincho en el agua.