Cincos platos para cocinar en compañía de tus amigos
Artículo revisado por el Comité
Cincos platos para cocinar con tus amigos
Estas son las oportunidades perfectas para que pongas en práctica las recetas que te mostramos en este post. Son cinco los platos que te proponemos aquí, ¡pero seguro se te ocurre alguno más! Pero recuerda: lo importante es que todos participéis y os divirtáis mientras cocináis.
1. Hummus y guacamole: Las salsas y cremas para compartir son una receta simple y que gusta a todo el mundo. El hummus y el guacamole son perfectos como acompañamiento de varios platos. El hummus es de origen oriental y está hecho, básicamente, de garbanzo. El segundo plato es muy común en México y su ingrediente principal es el aguacate. Divide las tareas de preparación entre los invitados, mientras os tomáis un aperitivo. Acuérdate de revisar si tienes todos los ingredientes y divertiros en la preparación de estas salsas que, además de buenísimas, son 100% saludables. El hummus es un acompañamiento perfecto a los palitos de pan, migas de pan o, incluso, trozos de torta salada. Mientras que el guacamole va siempre de la mano de los nachos e, incluso, de los nachos con queso. Este sí que es un plato que gustará a todos. Una copa de vino blanco y este delicioso manjar son el inicio perfecto de una noche entre amigos.
2. Pizza: Es imposible no relacionar una velada de amigos con una buena pizza. Muchas veces se opta por pedir pizza a domicilio, pero ¿por qué no hacerla vosotros mismos? ¡Es muy fácil además de saludable! Aquí van algunos consejos para que la pizza que preparéis todos juntos sea perfecta: compra la masa en una panadería de confianza, toma bien las medidas de todos los ingredientes y hornea la masa en su punto. Será divertido que elijáis los ingredientes entre todos y creéis pizzas únicas.
3. Paella: Qué mejor que un buen plato típico de nuestro país para disfrutar de un día de piscina con los amigos. Elegid si queréis una paella de carne, pescado, de verduras o mixta. Algunos datos curiosos que tal vez se te escapan a pesar de conocer muy bien la paella. Es un plato típico valenciano, que nació como plato para los pobres, pues se realizaba antiguamente con las sobras de la semana. Sin embargo, actualmente la paella es uno de los platos más famosos de nuestro país y, por qué no, protagonista de muchas reuniones entre amigos. Escoged concienzudamente los ingredientes: el pescado siempre fresco, arroz bomba, verduras de temporada y un buen caldo casero. Al tratarse de un plato elaborado, habrá tareas para todos los amigos que compartáis mesa. Mientras el arroz acaba de hacerse, podéis entreteneros con una copa de vino y una agradable charla, ya que una vez has echado el arroz, la paella acaba de hacerse prácticamente sola.
4. Barbacoa: Es la mejor opción para un día de pic-nic. Una barbacoa suele acabar siendo siempre una reunión animada y divertida. Además, existen muchas clases de barbacoa: para omnívoros, carnívoros, vegetarianos o veganos. Cualquier excusa es buena para disfrutar de una barbacoa entre amigos o familiares. Elegid el tema: carne, pescado, verduras…¡No olvides el queso! Es el mejor acompañante. Podéis repartiros las tareas antes de la quedada: que alguien se encargue de la parrilla, otra persona puede ocuparse de comprar carbón y leña, etc. Encended el fuego con tiempo y mantenedlo vivo durante toda la barbacoa. Encárgale a alguno de tus amigos que traiga salsa para acompañar la carne.
5. Crepes: He aquí nuestra propuesta más dulce. Las crepes son conocidas internacionalmente y son fáciles de cocinar. Además, podéis dejar volar vuestra imaginación y escoger los ingredientes que más os apetezcan para rellenar las deliciosas crepes: dulces o saladas, ¡o ambas opciones! Que alguien se haga cargo de hacer la masa, otra persona puede cocerlas, mientras un tercer amigo prepara los distintos rellenos. ¡Y que alguien haga guardia para que nadie se los coma antes de sentaros en la mesa! La receta es muy sencilla y podéis encontrarla en cualquier página web sobre cocina. Sólo necesitáis huevos, harina, leche, mantequilla, sal y azúcar y vainilla en el caso de las crepes dulces.